Panorama Nacional. Alcaldes de Paraíso Y Los Patos Francisco Acosta y Manuel Tezano aclaran que la recolección artesanal de bolos y chatas es una actividad tradicional, regulada y ambientalmente sostenible, de la que dependen aproximadamente 600 familias y que, además, contribuye al equilibrio ecosistémico de la zona.
Sin embargo, de acuerdo al informe técnico y evaluación ambiental, del Ministerio de Medio Ambiente y la Comisión Ambiental de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), la alta sedimentación de los ríos Nizaito, Bahoruco y Río Sito genera una acumulación excesiva de materiales en las desembocaduras y playas, afectando negativamente su estabilidad y biodiversidad. En este sentido, el retiro controlado y artesanal de Bolos y Chatas no solo no representa un daño ambiental, sino que, por el contrario, es una actividad que contribuye a la conservación de la costa, mitigando los efectos de la sedimentación y facilitando la regeneración natural de las playas.
Por esta razón, la recolección artesanal ha sido objeto de peritajes y evaluaciones técnicas realizadas con el acompañamiento de la Procuraduría Especializada para la Defensa del Medio Ambiente, el Servicio Nacional de Protección Ambiental (SENPA) y el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARENA).
Autorización y regulación de la actividad
Los estudios confirman que la actividad se encuentra bajo supervisión y control de las autoridades ambientales y municipales. En este sentido, los Ayuntamientos de Paraíso y Los Patos han asumido el compromiso de apoyar a las asociaciones de recolectores de la región, garantizando que la actividad se desarrolle de manera ordenada, regulada y con el rigor técnico necesario.
Los alcaldes Acosta y Tezano reiteran que la recolección no es una práctica ilegal ni depredadora, sino una labor artesanal con un impacto ambiental positivo, que además es una fuente de sustento vital para cientos de familias en condiciones de vulnerabilidad.
Llamado a la comunidad y a los medios
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Ante la desinformación que busca desacreditar esta actividad, los Ayuntamientos hacen un llamado a la ciudadanía y los medios de comunicación a basarse en la evidencia técnica y a reconocer el rol clave de esta práctica en la conservación costera. Asimismo, invitan a las autoridades y sectores interesados a sumarse al esfuerzo conjunto para asegurar que esta labor continúe desarrollándose de manera sostenible, regulada y en beneficio de la comunidad y el medio ambiente.