Tomado de Diario Libre
La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ha expresado que los haitianos pueden beneficiarse de los postulados de la Convención sobre los Refugiados de 1951, lo que les daría la protección necesaria para ser acogidos en otros países sin ser devueltos a Haití.
Esa es una declaración peligrosa y para la cual República Dominicana debe activar una mecánica defensiva profiláctica, porque es obvio que el tema se discute en algunos niveles de ese organismo internacional.
Dar a los haitianos estatus de refugiados políticos podría poner a nuestro país en una compleja posición, porque lo más sencillo para los vecinos es cruzar hacia acá, y brindaría a los miles de ilegales que pululan en nuestras calles el argumento perfecto para quedarse aquí con una protección legal.
En la ONU no pasa nada por casualidad. Que desde la ACNUR hayan lanzado esa piedra es para preocuparse, pero, por encima de todo, para ocuparse. Los países vecinos de Haití no estamos en posición de lidiar con un éxodo de personas con estatus de refugiados políticos, simplemente no tenemos la capacidad para poder hacernos cargo.