Publicado en varios diarios el 6 de enero de 2020.
Cuando uno pernocta por muchos años en su misma ciudad, probablemente los cambios suelen pasar desapercibidos, máxime si con frecuencia acudes al mismo lugar y no recibes la brisa que viene soplando en diversas direcciones, sobre todo si la pasión te obnubila y produce miopía.
Cuando tienes varios centros médicos, de laboratorios e imágenes, esparcidos por el municipio, creando fuentes de empleos y brindando servicios a la población, eso genera productividad económica positiva y mejora de calidad de vida.
Tener diversos centros ferreteros, de construcciones y de venta de materiales diversos inherentes, se puede observar que en los mismos hay una inmensa mano de obra laborando, en cuyas transacciones contribuyen a que se expandan las edificaciones y otras obras privadas, y públicas, que contribuyen a reducir el desempleo.
Contar con estaciones de combustibles por doquiera, brindando servicio, que te tropiezas con empleados que laboran en turnos alternos, que se ganan el sustento para mantener sus familias, mientras esos negocios dinamizan la actividad productiva con la gasolina y el gasoil que expenden al público.
De repente nos topamos con muchos negocios de expendio de comidas en todos los tramos de la ciudad en donde laboran muchos hombres y mujeres, brindando servicios, contribuyendo a mover la actividad comercial.
Hoteles pequeños, medianos y grandes, de varios niveles, con fuerte movimiento de empleados, ofreciendo servicio al denominado turismo interno y externo que llega a Barahona a disfrutar de sus maravillas naturales, los cuales asisten a entidades diversas a consumir lo que se vende, dinamizando la actividad comercial.
Centros Farmacéuticos, que ahora son varios, con muchas personas de ambos sexo que trabajan en ellos, generando un fuerte movimiento económico por las ventas diversas y el pago de mano de obra.
Tiendas de ropas, calzados, perfumerías, chucherías y otros diversos, a los que se suman las famosas pulgas de los vecinos de Haití, con inmensa carga laboral que degenera en un fuerte movimiento del circulante, todas compitiendo en precios y servicios.
Los supermercados y minimarket también se han expandido, en donde laboran muchos jóvenes que se ganan un sustento mensual, contribuyendo esto a que los barahoneros puedan adquirir productos a buen precio a nivel local.
Pero también se han expandido los centros tecnológicos, de comunicaciones y fotocopiados, en donde se ofrecen servicios técnicos, se venden productos y artículos relacionados, con gran movimiento de empleados a lo interno de los mismos.
Varias sucursales bancarias, financieras y negocios relacionados, que impulsan la actividad comercial y productiva con los préstamos que otorgan, teniendo en cada uno de ellos una fuerte cantidad.
El motoconcho se ha convertido en el mayor medio de actividad en este municipio, con miles de motoristas que obtienen los ingresos para mantener sus familias, ayudando al transporte rápido de las personas para hacer sus diligencias.
Centros de belleza, estéticas y otros relacionados, que se encuentran esparcidos por toda la ciudad, en donde trabajan estilistas que dinamizan la actividad económica.
Las agencias de ventas de efectos electrodomésticos ya son muchas, con una gran competencia entre ellas, teniendo esas entidades cientos de empleados, ayudando a que los hogares puedan tener los bienes del hogar que requieren, sin tener que ir sus propietarios a otras ciudades.
Panaderías y reposterías crecen en Barahona, con buena cantidad de empleados, ofreciendo productos de calidad a buen precio.
Las tiendas de ventas de repuestos aumentan cada vez más, con muchos empleados que laboran allí, contribuyendo a darle facilidades a los dueños de vehículos y motores para que puedan adquirir sus piezas a nivel local.
Sumando a todo lo anterior la gran cantidad de instituciones públicas y otras privadas no descritas en este artículo, incluyendo universidades, que hay en Santa Cruz de Barahona, en donde laboran miles de empleados, adicionando las empresas manufactureras de Khoury Industrial, Cemex, Ege Haina, Consorcio Azucarero Central, entre otras, se puede decir que La Perla del Sur y Novia del Caribe está generando un fuerte movimiento económico.
Y para concluir, hago mención de las hermosas y modernas edificaciones que se han venido levantando en los distintos sectores residenciales, tales como: Blanquizales, Punta Palma, El Naco, Los Maestros, El Laurel, Villa Central, Centro de la Ciudad, Teleantillas y otros, incluida la transformación urbanística que se ha producido en los distintos barrios, en donde las casas de palma se han cambiado por blocks y plato, aunque muchas se conservan de madera y cinc.
Lógicamente que a pesar de toda la actividad productiva y comercial que se ha estado produciendo, existen niveles de pobreza y marginalidad, con alta tasa de desempleo, sobre todo en los jóvenes.
Se requieren obras vitales e impostergables, como es una planta de aguas residuales, el matadero municipal, nuevo mercado público, asfaltado de todos los barrios y más proyectos habitacionales, entre otras.
Todo ese movimiento económico produce incremento de ITBIS e Impuesto Sobre la Renta, que ingresa al Estado, con lo cual se impulsa el Producto Interno Bruto de la República Dominicana.
El autor es comunicador y contador público autorizado.
