De repente se observa a nivel nacional una serie de renuncias de candidatos y dirigentes del partido Fuerza del Pueblo (FP), que de inmediato pasan a formar filas en el Partido Revolucionario Moderno (PRM)-gobierno, con la oferta de alguna posición en el Estado u otros incentivos colaterales, que casi nunca se dan a conocer.
Y es que el Oficialismo tiene muy buenos asesores nacionales e internacionales, miden semanal a los partidos y candidatos y saben perfectamente cómo está en estos momentos la situación política en la República Dominicana.
El voto se va endureciendo, los porcentajes imperantes irán cambiando conforme pasen los meses y se acerquen más las elecciones de febrero y mayo; de ahí que el partido gobernante tiene un monitoreo permanente con las encuestas que realiza.
Ya la dirigencia perremeista tiene descartado a Abel Martínez y el Partido de la Liberación Dominicana (PLD); están muy claros que la competencia será con Leonel Fernández; por tanto, hay que buscar la manera de disminuirlos, atrayendo dirigentes y candidatos de la FP.
Para las elecciones de mayo habrá una polarización. Se producirá un vuelco de peledeistas a votar por el expresidente Fernández, lo que saben los perremeistas muy bien.
Es por lo anterior que considero correcta la estrategia del PRM contra la FP. Los fuercistas-pueblistas deben ahora prepararse para contrarrestar el nuevo accionar oficialista.
