Los principales bancos europeos registran cada año 20,000 millones de euros (23,700 millones de dólares) --es decir, el 14% de sus beneficios totales--, en 17 jurisdicciones fiscales especialmente favorables, según los cálculos del Observatorio Fiscal Europeo, un centro de investigación independiente con sede en la Escuela de Economía de París.
Este porcentaje se ha mantenido estable desde 2014, a pesar de varios escándalos que revelaron las dudosas prácticas de las multinacionales para evadir impuestos.
"A pesar de la creciente importancia de estas cuestiones en el debate público y en el mundo de la política, los bancos europeos no han reducido significativamente su uso de los paraísos fiscales", afirma el organismo, financiado por la Comisión Europea y dirigido por el economista francés Gabriel Zucman.
El Observatorio revisó los datos publicados por 36 instituciones financieras durante el periodo 2014-2020 e identificó 17 Estados y territorios como destinos preferidos, entre ellos las Bahamas, las Islas Vírgenes Británicas, las Islas Caimán, Jersey y Guernsey, Gibraltar, Hong Kong, Macao, Panamá y Luxemburgo.
Entre los grandes bancos, identifican a HSBC como el campeón de estas prácticas. Más del 62% de sus beneficios antes de impuestos se contabilizaron en paraísos fiscales entre 2018 y 2020, frente al 49,8% del italiano Monte dei Paschi (BMPS), que ocupa el segundo lugar.
Standard Chartered (29.8%) completa el podio y los alemanes Deutsche Bank y NordLB ocupan el cuarto y quinto lugar.
En 2014 el escándalo de LuxLeaks, al que le siguió el de los Papeles de Panamá, puso la evasión fiscal en primer plano. Desde entonces, se está negociando en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) un impuesto mínimo sobre los beneficios de las multinacionales.